Cuando utilizamos la palabra accesorios son muchas las definiciones y contextos en los que pensamos. Por ejemplo, las mujeres piensan en el collar largo, en las pulseras rojas, en la cartera violeta… En detalles que le cambian el look a cualquier moda. Y precisamente, en la decoración de interiores, un cojín ejerce el mismo trabajo que unos zapatos amarillos.
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«Un accesorio, como los cojines, nos permite refrescar el ambiente y variarlo.»
Ethel Rullán, propietaria de Hogar es… nos explica que un accesorio decorativo es una pieza que tiene la particularidad de ser cambiable con gran facilidad dentro de la decoración y el entorno del espacio que estemos trabajando ya que generalmente es menos costosa y movible. Por ejemplo, cuando se escogen los muebles del hogar o la loza del piso, se invierte a largo plazo (más de cinco años) y, por ende, no se cambian con mucha frecuencia. Por su parte, los accesorios son más divertidos porque se pueden cambiar de habitación, con la época de año o con algún amigo o familiar.
Según Rullán, un accesorio, como los cojines, nos permite refrescar el ambiente y variarlo. Hace que el espacio se vea diferente, atractivo y nos hace sentir más a gusto. Puedes cambiarlos en cada temporada del año y le darás un nuevo look a tu casa. Junto con los cojines puedes cambiar accesorios como velas y flores que hagan juego con éstos. Una alfombra o cambiar el color de una pared, sin duda alguna, también creará otro efecto. La ventaja es que no tendrás que gastar mucho y tendrás una nueva decoración.
¡Anímate y trasforma tus espacios con accesorios decorativos!
Recurso: Ethel Rullán de Hogar es…
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